La Comisión Europea ha abierto tres investigaciones por posibles prácticas de venta online contrarias al Derecho de la Competencia que implican limitar la libertad de elección del consumidor a la hora de comprar productos electrónicos de consumo, videojuegos y de contratar estancias hoteleras.
La Comisión Europea sospecha que ciertas empresas pretenden privar a los consumidores de las ventajas de comparar y comprar online en otros países (geoblocking). Según este organismo, las empresas investigadas podrían haber aplicado una restricción ilegal de los precios de venta al público o excluir a los consumidores de algunas ofertas por motivo de su nacionalidad o ubicación. La Estrategia para el Mercado Único Digital de la Comisión señala una serie de obstáculos reguladores que entorpecen el comercio electrónico transfronterizo y propone una serie de iniciativas para evitarlos.
Sin perjuicio de lo anterior, también existen indicios de que las propias empresas podrían estar levantando barreras a dicho comercio con el ánimo de fragmentar el mercado único de la UE siguiendo las líneas de las fronteras nacionales y así evitar la competencia.
En determinadas circunstancias, el geoblocking puede suponer una infracción del artículo 101 TFUE al dificultar las compras transfronterizas o las compras en línea en general y, en último término, perjudicar a los consumidores al privarles de una mayor capacidad de elección y unos precios más bajos al recurrir al comercio electrónico.
Las empresas investigadas pertenecen a tres sectores:
- Fabricantes de electrónica de consumo: Asus, Denon & Marantz, Philips y Pioneer. El efecto de estas supuestas restricciones de los precios podría agravarse debido a la utilización, por parte de muchos vendedores online, de software de fijación de precios que adapta automáticamente los precios de venta a los de los principales competidores.
- Videojuegos: Valve Corporation, propietaria de la plataforma de distribución de juegos Steam, y cinco desarrolladoras de videojuegos, a saber, Bandai Namco, Capcom, Focus Home, Koch Media y ZeniMax. La investigación busca aclarar si las empresas impiden a los consumidores comprar contenidos digitales por razón de la ubicación o el país de residencia de los consumidores.
- Discriminación en los precios de los hoteles: Tras recibir varias denuncias de clientes, la Comisión está investigando ciertos acuerdos sobre servicios de alojamiento hotelero celebrados entre los principales operadores turísticos europeos, por una parte (Kuoni, REWE, Thomas Cook y TUI), y determinados hoteles, por otra (Hoteles Meliá). La iniciativa de los hoteles para desarrollar e introducir mecanismos innovadores de fijación de precios que maximicen la ocupación de las habitaciones es bienvenida por la propia Comisión Europea, pero ni los hoteles ni los operadores turísticos pueden discriminar a los clientes en función de su ubicación. Los acuerdos en cuestión podrían contener cláusulas que discriminen a determinados clientes en razón de su nacionalidad o su país de residencia, como consecuencia de cuya aplicación no podrían ver la disponibilidad real del hotel o reservar habitaciones a los mejores precios.
Las investigaciones en los sectores de la electrónica de consumo y los videojuegos son las primeras derivadas de las dificultades detectadas en la investigación de la Comisión en materia de competencia en el sector del comercio electrónico.
Fuente: Comisión Europea